Mitli Ocelotl Escribe - Ángel de la Muerte
Ángel de la Muerte
Que lejanas mañanas envuelven un final
se respira frio y miedo tal como lo hace el animal
Se sabia porque cantado estaba el presagio
pero son notas sin tonos ni adagios
Avanzar al lugar donde termina lo terrenal
en donde el ultimo paso es territorio descomunal
Son las pisadas que mas cuesta decidir
porque es regresar a la inocencia del niño que comienza a maldecir
Siluetas formas, caras, sonidos, y murmullos
todos incomprensibles como es orarle a un muro
Matices grises negros y sepias adornan mi presencia
soy el ángel de la muerte que emana sombras sin clemencia
Solo yo sonrió de saber de la desolación del ser humano
no me golpeo el pecho por lo antes mencionado
y es que el ser primal no entiende este noble acto
soy el alivio que se enciende al tocar la mano
Se sabe que al extender el alma al umbral
soy la eterna tranquilidad
soy besos sin final
soy el edén del mil vida por asignar
Pero que tonto primate que se aferra
retuerce los dientes, cierra puños y desespera
porque no reconoce que la muerte es cierta
y su vida no vive a pesar de ser incertidumbre estrecha
Son pocos los que con dicha me abrazan
Pues el miedo es para aquellos que esconcen la cara
los prejuicios son alfombras que cortan al descalzo
y te pregunto ¿Estas listo para dar el primer paso?
Da igual tu deseo, tengo prisa
la labor de hoy representa miles al día
¿Pensaste que tu fragilidad de situación me podría entretener?
Insensato ser humano nunca nadie me logro detener
Con paso rápido se aproxima el eterno al incauto
dulcemente recorre sus brazos
el extraño lenguaje del cuerpo descolorido
por fin se convierte en un extraño suplicio
Pero que cosa asombrosa es sentir paz
pensamientos en calma cual lago sin agitar
Sollozos desconsolados se vuelven cantos
en un plano ajeno a este son recibimientos y relicarios
Que bello acto es soltar tu cuerpo y confiar
parecido al riego que transita su propia realidad
que hermoso es presenciar los últimos latidos
toda una vida en un ultimo suspiro
Ve toma su mano del que calma tu dolor
vuelve a ir rápido y cántale al sol
brilla y se la luz de ese plano
vuelen juntos mi pecho al fin esta calmado
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